Hay dos razones principales que deberían motivarnos para servir a Elohim: temor y amor. El amor es superior al temor. Los rabinos antiguos (de los Sifrei) distinguieron dos formas principales de demostrar nuestro amor al Eterno. La primera es el estudio de la Toráh, la revelación de Dios, la segunda es hacer que otros Le amen.

Podemos obedecer a Dios porque tememos Su ira y castigo. Podríamos elegir obedecerle porque tememos las consecuencias que El traerá sobre nosotros si no lo hacemos. Podríamos obedecerle porque tememos la condenación. El temor produce un tipo muy pragmático de relación con Dios. Es lo mismo que cuando conducimos al límite de velocidad, tememos las consecuencias de ser atrapados violándolo. Pero también es una relación muy interesada. El énfasis está en la protección de uno mismo.

El amor, por otro lado, es desinteresado.

Es el camino más elevado del servicio. El apóstol Juan explica que nuestra fe en el Mesías elimina la motivación por temor y purifica nuestro servicio al Eterno en un amor puro. (1 Juan 4: 17-18)

Yeshúa enseña que amar al Señor es el mandamiento más importante. (Marcos 12: 29-30). Nuestro
amor a Dios debe ser el impulso principal detrás de todo lo que hacemos. Debe ser una pasión inextinguible, como un hombre o una mujer siente por su prometida(o).

“Amor” no es demasiado pedir de parte de Él. Después de todo, “Él nos amó primero.” (1 Juan 4: 19).
Su amor se hizo manifiesto en que

“Él nos amó y envió a Su Hijo para ser la propiciación por nuestros pecados”.

1 Juan 4: 9-10

Pero, ¿Cómo podemos expresar nuestro amor a Elohim? El apóstol Juan nos enseña que la verdadera
expresión de amor al Eterno es guardar Sus mandamientos y amar a nuestro prójimo (que es el
segundo mayor mandamiento). Él dice,

“Porque éste es el amor de Dios: que guardemos Sus mandamientos, y Sus mandamientos no son gravosos.”

1 Juan 5: 3

Y él también dice,

“Si alguien dice: “Yo amo a Dios,” pero aborrece a su hermano, es un mentiroso. Porque el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede amar a Dios a quien no ha visto”.

1 Juan 4: 20

Los rabinos antiguos (de los Sifrei) distinguieron dos formas principales de demostrar nuestro amor a
Elohim:

• La primera es estudiar la Torá, la revelación de Elohim. Si realmente Lo amamos, haremos todo lo
  posible para conocerle y servirle.

• La segunda es contribuir a que otros Lo amen. Si realmente Lo amamos, deseamos ver que otros se reconcilien con Él también.

Por lo tanto, la mejor manera de mostrar nuestro amor a Elohim es, estudiando Su Torá, guardando Sus mandamientos y traer a otros a la relación con El a través de Su Hijo Yeshua Mashiaj.

Shabat Shalom

De la pluma del Rabino
Rabbí Peretz ben Yehudah M.A. Th.

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