Lectura parashá Ki tetze

כִּֽי־תֵצֵ֥א לַמִּלְחָמָ֖ה עַל־אֹיְבֶ֑יךָ וּנְתָנ֞וֹ יְהוָ֧ה אֱלֹהֶ֛יךָ בְּיָדֶ֖ךָ וְשָׁבִ֥יתָ שִׁבְיֽוֹ

Ki-Tetze’ lamiljamah ‘al-‘oyevéja unetano YHVH ‘Elohéja beyadeja veshavíta shiveyo

Cuando vayas a la guerra contra tus enemigos y el SEÑOR tu Dios los entregue en tu mano, y tomes de ellos cautivos…”

Torah

Devarim (Deuteronomio) 21:10-25:19

Haftarah

Isaías 54:1-10

Brit Jadashah

1 Corintios 5:1-5

Deuteronomio 21:10-21 (RVA2015)

10 Cuando vayas a la guerra contra tus enemigos y el SEÑOR tu Dios los entregue en tu mano, y tomes de ellos cautivos; 11 si entre los cautivos ves alguna mujer hermosa y la deseas y la quieres tomar para ti como mujer, 12 la llevarás a tu casa. Ella rapará su cabeza, se arreglará las uñas, 13 se quitará su vestido de cautiva y se quedará en tu casa. Hará duelo por su padre y por su madre durante un mes. Después de esto podrás unirte a ella; tú te casarás con ella, y ella será tu mujer. 14 Pero sucederá que si ella no te agrada, la dejarás ir libre, a su propia voluntad. No la venderás por dinero ni la tratarás brutalmente, porque la has deshonrado.

15 “Si un hombre tiene dos mujeres (la una amada y la otra aborrecida); si tanto la amada como la aborrecida le han dado hijos, y si el hijo primogénito es de la mujer aborrecida, 16 sucederá que el día en que haga heredar a sus hijos lo que tiene, no podrá tratar como a primogénito al hijo de la mujer amada, prefiriéndolo al hijo de la aborrecida, el cual es el primogénito. 17 Reconocerá al hijo de la mujer aborrecida como primogénito para darle una doble porción de todo lo que tiene. Suyo es el derecho de la primogenitura, porque él es la primicia de su vigor.

18 “Si un hombre tiene un hijo porfiado y rebelde, que no obedece la voz de su padre ni la voz de su madre, y que a pesar de haber sido castigado por ellos, con todo no les obedece, 19 entonces su padre y su madre lo tomarán y lo llevarán ante los ancianos de su ciudad, al tribunal local. 20 Entonces dirán a los ancianos de la ciudad: ‘Este hijo nuestro es porfiado y rebelde. No obedece nuestra voz; es un libertino y un borracho’. 21 Entonces todos los hombres de su ciudad lo apedrearán, y morirá. Así quitarás el mal de en medio de ti, y todo Israel lo oirá y temerá.

Deuteronomio 21:22 – 22:7 (RVA2015)

22 “Si un hombre ha cometido pecado que merece la muerte, por lo cual se le ha dado la muerte, y lo has colgado de un árbol, 23 no quedará su cuerpo en el árbol durante la noche. Sin falta le darás sepultura el mismo día, porque el ahorcado es una maldición de Dios. Así no contaminarás la tierra que el SEÑOR tu Dios te da como heredad.

22 “Si encuentras extraviado el buey o la oveja de tu hermano, no te desentenderás de ellos. Deberás devolverlos a tu hermano. Y si tu hermano no vive cerca de ti, o no lo conoces, recógelo en tu casa. Estará contigo hasta que tu hermano lo busque, y entonces se lo devolverás. Lo mismo harás con su asno, con su vestido y con toda cosa perdida que tu hermano haya perdido y que tú halles. No podrás desentenderte de ello.

“No podrás ver caído en el camino el asno o el buey de tu hermano y desentenderte de ellos. Sin falta ayúdale a levantarlo.

“La mujer no se vestirá con ropa de hombre ni el hombre se pondrá vestido de mujer; porque cualquiera que hace esto es una abominación al SEÑOR tu Dios.

“Si encuentras en el camino, en algún árbol o en la tierra, el nido de un pájaro con polluelos o con huevos, y la madre está sobre los polluelos o sobre los huevos, no tomes la madre con los polluelos. Dejarás ir a la madre y podrás tomar para ti los polluelos, para que te vaya bien y prolongues tus días.

Deuteronomio 22:8 – 23:7 (RVA2015)

“Cuando construyas una casa nueva, haz una baranda a tu azotea, para que no traigas culpa de sangre a tu casa, si alguien se cayera de ella.

“No sembrarás tu viña con mezcla de semillas, no sea que el producto entero de la semilla que hayas sembrado, así como el fruto de la viña, sea confiscado.

10 “No ararás con buey y con asno juntamente.

11 “No te vestirás con mezcla de lana y lino.

12 “Harás borlas en los cuatro extremos de tu manto con que te cubras.

13 “Si un hombre toma mujer y después de haberse unido a ella le toma aversión, 14 la acusa de conducta denigrante y le propaga mala fama diciendo: ‘A esta mujer tomé por esposa, me uní a ella y no hallé en ella evidencias de virginidad’, 15 entonces el padre y la madre de la joven tomarán las evidencias de la virginidad de la joven y las llevarán a los ancianos de la ciudad, al tribunal. 16 El padre de la joven dirá a los ancianos: ‘Yo di a mi hija por mujer a este hombre, y él le tiene aversión. 17 Y he aquí la acusa de conducta denigrante, diciendo: No he hallado en tu hija evidencias de virginidad. Pero aquí están las evidencias de la virginidad de mi hija’. Y extenderán la sábana delante de los ancianos de la ciudad.

18 “Entonces los ancianos de la ciudad tomarán al hombre y lo castigarán. 19 Por cuanto propagó mala fama a una virgen de Israel, le impondrán una multa de un kilo de plata (lo cual darán al padre de la joven); y ella será su mujer. Él no la podrá despedir en toda su vida.

20 “Pero si el asunto es verdad, que no se habían hallado evidencias de virginidad en la joven, 21 entonces la sacarán a la puerta de la casa de su padre. Luego los hombres de su ciudad la apedrearán, y ella morirá; porque hizo vileza en Israel fornicando en la casa de su padre. Así quitarás el mal de en medio de ti.

22 “Si se sorprende a un hombre acostado con una mujer de otro hombre, ambos morirán: el hombre que se acostó con la mujer, y la mujer. Así quitarás el mal de Israel.

23 “Si un hombre halla en la ciudad a una joven virgen desposada con otro hombre, y se acuesta con ella, 24 entonces los sacarán a ambos a la puerta de aquella ciudad, y los apedrearán. Así morirán: la joven, porque estando en la ciudad no gritó; y el hombre, porque violó a la mujer de su prójimo. Así quitarás el mal de en medio de ti.

25 “Pero si un hombre halla en el campo a una joven desposada, y la fuerza y se acuesta con ella, morirá solo el hombre que se acostó con ella. 26 A la joven no le harás nada; la joven no tiene culpa de muerte. Su caso es semejante al del hombre que se levanta contra su prójimo y le quita la vida, 27 porque él la halló en el campo y aunque la joven desposada hubiera gritado, no habría habido quien la librara.

28 “Si un hombre halla a una joven virgen que no esté desposada, y la fuerza y se acuesta con ella, y son descubiertos, 29 entonces el hombre que se acostó con ella dará al padre de la joven quinientos cincuenta gramos de plata; y ella será su mujer. Porque él la violó, no la podrá despedir en toda su vida.

30 “Ningún hombre tomará la mujer de su padre ni descubrirá el manto[a] de su padre.

23 “No entrará en la congregación del SEÑOR quien tenga los testículos magullados o mutilado el miembro viril.

“No entrará el bastardo en la congregación del SEÑOR. Ni aun en la décima generación entrará en la congregación del SEÑOR.

“No entrará el amonita ni el moabita en la congregación del SEÑOR. Ni aun en la décima generación entrarán jamás en la congregación del SEÑOR, por cuanto no salieron a recibirlos al camino con pan y agua cuando ustedes salieron de Egipto, y porque él[b] contrató contra ti a Balaam hijo de Beor, de Petor, de Siria mesopotámica, para que te maldijera. Pero el SEÑOR tu Dios no quiso escuchar a Balaam. El SEÑOR tu Dios te convirtió la maldición en bendición, porque el SEÑOR tu Dios te amaba. No procurarás jamás la paz ni el bienestar de ellos, en todos tus días.

“No abominarás al edomita, porque es tu hermano. No abominarás al egipcio, porque fuiste extranjero en su tierra.

Deuteronomio 23:8-24 (RVA2015)

Los hijos que les nazcan en la tercera generación entrarán en la congregación del SEÑOR.

“Cuando salgas en campaña contra tus enemigos, cuídate de toda cosa mala. 10 Si hay en ti algún hombre que no está puro debido a una emisión nocturna, saldrá del campamento y no entrará en él. 11 Y sucederá que antes del anochecer se lavará con agua, y una vez que el sol se haya puesto podrá entrar en el campamento.

12 “Tendrás un lugar fuera del campamento, y allá saldrás. 13 Tendrás también en tu cinto[a] una estaca; y cuando vayas allí fuera, cavarás con ella y te darás vuelta para cubrir tu excremento. 14 Ciertamente el SEÑOR tu Dios se pasea en medio de tu campamento, para librarte y para entregar a tus enemigos delante de ti. Por eso tu campamento deberá ser santo, de modo que él no vea en medio de ti alguna cosa indecente y se aparte de ti.

15 “No entregarás a su amo el esclavo que acude a ti escapándose de su amo. 16 Que viva contigo, en medio de ti, en el lugar que él escoja en una de tus ciudades, donde le vaya bien. No lo oprimas.

17 “No habrá prostituta sagrada entre las hijas de Israel ni prostituto sagrado entre los hijos de Israel. 18 No traerás a la casa del SEÑOR tu Dios, por ningún voto, el salario de una prostituta ni el salario de un prostituto, porque ambos son una abominación al SEÑOR tu Dios.

19 “No cobrarás a tu hermano interés por el dinero, ni interés por la comida, ni interés por ninguna cosa de la que se suele cobrar interés. 20 Al extraño podrás cobrar interés, pero a tu hermano no le cobrarás, para que el SEÑOR tu Dios te bendiga en todo lo que emprenda tu mano en la tierra a la cual entras para tomarla en posesión.

21 “Cuando hagas un voto al SEÑOR tu Dios, no tardes en cumplirlo; porque ciertamente el SEÑOR tu Dios te lo demandará, y sería en ti pecado. 22 Pero si te abstienes de hacer un voto, no sería en ti pecado. 23 Cumplirás lo que tus labios pronuncien; harás de acuerdo con el voto que hayas hecho al SEÑOR tu Dios, la ofrenda voluntaria que hayas prometido con tu boca.

24 “Cuando entres en la viña de tu prójimo, podrás comer las uvas que quieras, hasta saciarte; pero no las pondrás en tu cesta.

Deuteronomio 23:25 – 24:4 (RVA2015)

25 “Cuando entres en la mies de tu prójimo, podrás cortar espigas con tu mano, pero no aplicarás la hoz a la mies de tu prójimo.

24 “Si un hombre toma una mujer y se casa con ella, y sucede que ella no le agrada por haber él hallado en ella alguna cosa vergonzosa, le escribirá una carta de divorcio, la entregará en su mano y la despedirá de su casa.

“Salida ella de su casa, podrá ir y casarse con otro hombre. Si este hombre la llega a aborrecer, le escribe una carta de divorcio, la entrega en su mano, la despide de su casa; o si muere este hombre que la tomó por mujer, entonces su primer marido que la despidió no podrá volverla a tomar para que sea su mujer, después que ella fue mancillada, porque esto sería una abominación delante del SEÑOR. No has de traer pecado a la tierra que el SEÑOR tu Dios te da por heredad.

Deuteronomio 24:5-13 (RVA2015)

“Si un hombre ha tomado recientemente esposa, no irá al ejército ni se le impondrá ninguna obligación. Estará libre en su casa durante un año, para alegrar a su mujer que tomó.

“No tomarás[a] en prenda la piedra de molino, ni la inferior ni la superior, porque ello sería tomar en prenda la vida misma.

“Si se descubre que alguien ha raptado a alguno de sus hermanos, los hijos de Israel, y lo ha tratado brutalmente o lo ha vendido, ese ladrón morirá. Así quitarás el mal de en medio de ti.

“Ten cuidado de la plaga de la lepra, observando diligentemente y haciendo conforme a todo lo que les enseñen los sacerdotes levitas. Tendrán cuidado de actuar como yo les he mandado. Acuérdate de lo que el SEÑOR tu Dios hizo a María, en el camino, cuando salieron de Egipto.

10 “Cuando des a tu prójimo algún préstamo, no entres en su casa para tomarle prenda. 11 Te quedarás fuera, y el hombre a quien prestaste te sacará fuera la prenda. 12 Y si es hombre pobre, no pases la noche con su prenda. 13 Sin falta le devolverás la prenda cuando el sol se ponga, para que se acueste con su ropa y te bendiga. Y te será contado por justicia delante del SEÑOR tu Dios.

Deuteronomio 24:14 – 25:19 (RVA2015)

14 “No explotes al jornalero pobre y necesitado, tanto de entre tus hermanos como de entre los forasteros que estén en tu tierra, en tus ciudades. 15 En su día le darás su jornal. No se ponga el sol antes de que se lo des, pues él es pobre, y su alma lo espera con ansiedad. No sea que él clame al SEÑOR contra ti, y en ti sea hallado pecado.

16 “Los padres no serán muertos por culpa de los hijos ni los hijos serán muertos por culpa de los padres; sino que cada cual será muerto por su propio pecado.

17 “No torcerás el derecho del forastero o del huérfano ni tomarás en prenda la ropa de la viuda. 18 Más bien, acuérdate de que fuiste esclavo en Egipto y que de allí te rescató el SEÑOR tu Dios. Por eso yo te mando que hagas esto.

19 “Cuando siegues tu mies en tu campo y olvides en el campo una gavilla, no regresarás para tomarla. Será para el forastero, para el huérfano y para la viuda; a fin de que el SEÑOR tu Dios te bendiga en toda la obra de tus manos. 20 Cuando varees tu olivo, no vuelvas a golpearlo detrás de ti; será para el forastero, para el huérfano y para la viuda. 21 Cuando vendimies tu viña, no la rebusques; será para el forastero, para el huérfano y para la viuda. 22 Acuérdate de que fuiste esclavo en la tierra de Egipto; por eso yo te mando que hagas esto.

25 “Cuando haya pleito entre algunos y acudan al tribunal para que los juzguen, absolverán al justo y condenarán al culpable. Sucederá que si el delincuente merece ser azotado, el juez lo hará recostar en el suelo y lo hará azotar en su presencia. El número de azotes será de acuerdo al delito. Podrá darle cuarenta azotes; no añadirá más. No sea que, si se le dan más azotes que estos, tu hermano quede envilecido ante tus ojos.

“No pondrás bozal al buey cuando trilla.

“Si unos hermanos viven juntos y muere uno de ellos sin dejar hijo, la mujer del difunto no se casará fuera de la familia con un hombre extraño. Su cuñado se unirá a ella y la tomará como su mujer, y consumará con ella el matrimonio levirático. El primer hijo que ella dé a luz llevará el nombre del hermano muerto, para que el nombre de este no sea borrado de Israel.

“Si tal hombre no quiere tomar a su cuñada, entonces su cuñada irá a los ancianos, a la puerta de la ciudad, y dirá: ‘Mi cuñado rehúsa levantar nombre en Israel a su hermano; él no quiere cumplir el matrimonio levirático conmigo’. Entonces los ancianos de su ciudad lo llamarán y hablarán con él. Si él se pone de pie y dice: ‘No quiero tomarla’, entonces su cuñada se acercará a él delante de los ancianos, quitará el calzado del pie de él, le escupirá en la cara y le dirá: ‘¡Así se haga al hombre que no edifica la casa de su hermano!’. 10 Y se llamará su nombre en Israel Casa del Descalzado.

11 “Cuando unos hombres peleen, el uno con el otro, y se acerque la mujer de uno de ellos para librar a su marido de manos del que lo golpea, y alargando su mano le agarra por sus partes genitales, 12 entonces le cortarás la mano a ella. Tu ojo no le tendrá lástima.

13 “No tendrás en tu bolsa pesa grande y pesa chica. 14 No tendrás en tu casa medida grande y medida chica. 15 Pesa exacta y justa tendrás; medida exacta y justa tendrás, para que tus días se prolonguen en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da. 16 Porque cualquiera que hace estas cosas, cualquiera que hace injusticia, es una abominación al SEÑOR tu Dios.

17 “Acuérdate de lo que te hizo Amalec en el camino, cuando salieron de Egipto: 18 cómo, estando tú cansado y agotado, te salió al encuentro, y sin temor de Dios desbarató tu retaguardia y a todos los debilitados que iban detrás de ti. 19 Sucederá que cuando el SEÑOR tu Dios te haya dado reposo de todos tus enemigos de alrededor, en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da por heredad para que tomes posesión de ella, entonces borrarás de debajo del cielo la memoria de Amalec. ¡No te olvides!

Isaías 54:1-10 (RVA2015)

54 “¡Alégrate, oh estéril que nunca has dado a luz! Prorrumpe en cánticos y grita de júbilo, tú que nunca tuviste dolores de parto. Porque más son los hijos de la desolada que los de la desposada”, ha dicho el SEÑOR.

“Ensancha el sitio de tu tienda, y sean extendidos los tapices de tus moradas. No te limites; alarga tus cuerdas y afirma tus estacas. Porque vas a extenderte a la derecha y a la izquierda; tus descendientes heredarán naciones y habitarán las ciudades desoladas.

“No temas, porque no serás avergonzada; no seas confundida, porque no serás afrentada. Pues te olvidarás de la vergüenza de tu juventud, y de la afrenta de tu viudez no tendrás más memoria. Porque tu marido es tu Hacedor; el SEÑOR de los Ejércitos es su nombre. Tu Redentor, el Santo de Israel, será llamado Dios de toda la tierra. Porque el SEÑOR te ha llamado como a una mujer abandonada y triste de espíritu, como a la esposa de la juventud que ha sido repudiada, dice tu Dios. Por un breve momento te dejé, pero con gran compasión te recogeré. Al desbordarse mi ira, escondí de ti mi rostro por un momento; pero con misericordia eterna me compadeceré de ti, dice tu Redentor el SEÑOR. Esto será para mí como en los días de Noé[a]: Como juré que las aguas de Noé nunca más pasarían sobre la tierra[b], así he jurado que no me enojaré contra ti ni te reprenderé. 10 Aunque los montes se debiliten y las colinas se derrumben, mi misericordia no se apartará de ti. Mi pacto de paz será inconmovible, ha dicho el SEÑOR, quien tiene compasión de ti.

1 Corintios 5:1-5 (RVA2015)

5 Ciertamente, se oye que hay entre ustedes inmoralidad sexual, y una inmoralidad tal como ni aun entre los gentiles se tolera; tanto, que hay quien tiene la esposa de su padre. ¡Y ustedes están inflados de soberbia! ¿No habría sido preferible llorar, para que el que ha cometido semejante acción fuera expulsado de entre ustedes?

Aunque por cierto estoy ausente en el cuerpo, estoy presente en el espíritu. Ya he juzgado, tal como si estuviera presente, a aquel que ha hecho semejante cosa. En el nombre de nuestro Señor Jesús, reunidos ustedes y mi espíritu con el poder de nuestro Señor Jesús, entreguen al tal a Satanás para la destrucción de la carne, a fin de que su espíritu sea salvo en el día del Señor.

¿Cuál es el significado de, “porque ellos serán guirnaldas/diademas de gracia?” R. Finees B. Hama dijo: “A donde quiera que vayas, obras piadosas te acompañarán.”

(Devarim Rabá 6.3)

Esta parashá es típica de lo que muchos han llamado un “código de leyes”. Contiene docenas de enseñanzas aparentemente desconectadas. Por lo tanto, es muy difícil proporcionar un contorno, especialmente un esquema basado en el flujo del material como lo hemos estado haciendo a lo largo de estos comentarios.

Sin embargo, uno de los hechos que sabemos acerca de este pasaje es que no es un código legal. Es, más bien, un pacto. Sabiendo eso, hace toda la diferencia en el mundo al tratar de entender el contenido de esta porción de la Torah. Si consideramos el material solamente como un código de leyes, entonces se convierte en una lista onerosa de haga o no haga. Por el contrario, si reconocemos las enseñanzas como las instrucciones del Santo diseñadas para ayudar al pueblo de Dios para disfrutar de sus promesas, entonces resulta mucho más fácil, incluso deseable vivir de la manera adecuada.

De hecho, este estudio es parte del Pacto de la Torah conocido como “Las disposiciones”. Las estipulaciones son ésos enseñanzas del pacto, que tienen su base en los grandes dones de gracia que el Eterno da al pueblo. La idea es que, puesto que Dios nos ama, nos ha dado maneras de demostrar nuestro amor hacia ÉL y, en el proceso, poder estar más dispuestos para disfrutar de la bendición de vivir en la comunidad redimida.

Debido al tiempo y espacio, yo no puedo comentar en todos los muchos temas que se encuentran en esta parashá (por lo menos veintiocho temas diferentes). En cambio, he decidido comentar algunos de los principios o razones de muchas de las enseñanzas subyacentes. Por lo tanto, estudiaremos las expresiones de la Torah de:

  • Trato justo
  • Indiferencia
  • Consideración
  • Santidad