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Doctrina Fundamental
Por tanto, dejando las doctrinas elementales de Cristo, sigamos adelante hasta la madurez sin poner de nuevo el fundamento del arrepentimiento de obras muertas, de la fe en Dios, de la doctrina de bautismos, de la imposición de manos, de la resurrección de los muertos y del juicio eterno.
¿Qué sigue una vez que comienzo mi andar en pos de Mashiaj? Debemos comenzar con los rudimentos de Mashiaj, es decir, los cimientos sobre los cuales debemos sobre-edificar. No podemos sobre-edificar en cualquier cimiento y tampoco podemos edificar como creamos que sea más conveniente para nosotros. Debemos recurrir a la instrucción del Eterno para edificar de forma que la casa que levantemos sea una donde Él desee habitar. Pero antes debemos encontrar ubicarnos en el cimiento correcto.
Como diría Mashiaj: “… para construir una casa, cava hondo y echa los cimientos sobre roca sólida.” Lucas 6:48 (NTV). Mashiaj mismo nos dice cuál es el cimiento: “Les mostraré cómo es cuando una persona viene a mí, escucha mi enseñanza y después la sigue…” Lucas 4:47 (NTV). Aquel que cava hondo en la Torah y llega a la Roca, Mashiaj Yeshúa, realmente tiene un cimiento sólido. De allí en delante, si construye con base a ese cimiento, no importa las tormentas que vengan y azoten contra esa casa, no va a ceder ni un poco.
Rab Shaul enseña que debemos tener cuidado de la doctrina que enseñamos y que otros tratan de infiltrar a la congregación. Si la tal doctrina aleja a la persona de la Torah, la tal es digna de desecharse. Si la tal te aleja de Yeshúa y más aún trata de demeritar la divinidad de Yeshúa, la tal doctrina es digna de desecharse. Quien vive pregonando este alejamiento va rumbo a la apostasía. Pero quien niega la divinidad de Yeshúa no tiene salvación.
Es por esta razón que nos instruyen a “tener cuidado de la doctrina“, para mantenernos firmes hasta el final. Como Rab Shaul dice: “haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren“. En otras palabras, permanecerás en la salvación que Yeshúa te ha dado y serás ejemplo a otros para permanecer en la salvación, en la justicia y en santidad. (1 Timoteo 4:16).
Rabbí Peretz ben Yehudah toma ocasión en esta mini-serie para instruir en los fundamentos de Mashiaj para que el creyente construya de manera que su templo personal sea uno fuerte y agradable al Eterno. De igual manera cualquier creyente que no haya sido instruido en estos fundamentos puede estudiarlos para corregir y enderezar la construcción de su Templo al Ruaj haKodesh del Eterno.