LecturaParashaPekudei

Porcion #23 de la Torah

Toráh: Éxodo 38:21-40:38
Haftará: 1 Reyes 7:51-8:21
Brit Jadashah: Hebreos 8:1-13

 

Resumen de la porción.


La parashá Pekudei generalmente se ve unida a Vayakhel pero debido a este año en especial, podemos analizarla en profundidad en un estudio aparte.

La porción inicia con Betzalel (Bezaleel) y Oholiav (Aholiab) que, bajo la supervisión de Itamar hijo de Aharon, le daban cuentas a Moshé con respecto a lo utilizado de la ofrenda del pueblo y cada una de las hechuras, labrados y confecciones para esta gran obra. La Torah registra una gran cantidad de material preciado para construir el arca, la mesa del pan del rostro, la menorah, y los altares de oro y bronce y sus utensilios. De igual forma las cuenta de cómo se confeccionó la vestidura sacerdotal cerrando esta descripción con la tiara y la placa: Santidad a Y’hováh.

Finalmente, se entregan las cuentas respecto a la tienda, las cubiertas y el atrio. Toda obra siempre descrita para testimonio de las generaciones: como Y’hováh había mandado.

Moshé se vio complacido de que el pueblo en lugar de desviarse a sus propios propósitos se dedicó en cuerpo y alma a seguir sus instrucciones. Satisfecho de que el pueblo obedeció finalmente al Eterno los bendijo.

Seguidamente el Señor le indica a Moshé que la tienda tiene que levantarse el día primero del primer del mes. Recordando lo que anteriormente dijo el Eterno que el primer mes para nosotros como pueblo será el llamado Aviv (a causa del trigo “aviv” o listo para empezar a espigarse).

En ese día Moshé levantó o hizo levantar el tabernáculo bajo sus instrucciones cual arquitecto y perito de la obra. Al colocar cada uno de los elementos los ungió y así dedico al Eterno.

Finalmente levantó el patio o atrio del tabernáculo y se puso la cortina de la entrada. Una vez finalizada la construcción, el Eterno bajó sus pies del Sinaí para venir a llenar esa casa portátil, esa morada móvil. Su Gloria y Majestad, su Justicia y Amor vino a llenar el lugar de tal forma que ni aún Moshé podía entrar a la casa.

¡Que sorprendente muestra de amor nos dio el Eterno! Él está cercano y se mueve entre su pueblo. A la vez nadie puede acercarse cuando quiera y mucho menos como le dé la gana. El venir a la Tienda de Reunión, el pueblo debe recordar que el Eterno incontenible por los cielos de los cielos se limita a sí mismo para poder estar con nosotros. Pero esa grandeza aún se hace sentir para temor reverente de quien le busca.

Al igual que el tabernáculo, Yeshúa haMashiaj Ben Elohim, ben David tomo una tienda movible para que en esa habitara la plenitud de la deidad. ¡Qué muestra de amor del Eterno!, envía a su hijo unigénito y primogénito para que al igual que en el Sinaí, el pueblo vuelva a sentir la llenura de Elohim en sus vidas.

Finalmente Y’hováh le indicaba al pueblo cuando marchar y cuándo detenerse y cuánto tiempo debería permanecer acampando en un lugar. A la orden del Eterno como cabeza toda la congregación, que trabajó de manera santa y correcta el tabernáculo, cual cuerpo se mueve siguiendo y creyendo en la dirección que indicaba la cabeza.

Lectura de la Parashá

Exodo 38:21 – 39:1 (RVA)


21 Estas son las cantidades de materiales usados para el tabernáculo, el tabernáculo del testimonio, que por orden de Moisés fueron escritas en un registro por los levitas, bajo la dirección de Itamar, hijo del sacerdote Aarón.

22 Bezaleel hijo de Uri, hijo de Hur, de la tribu de Judá, hizo todo lo que el SEÑOR había mandado a Moisés, 23 junto con Oholiab hijo de Ajisamac, de la tribu de Dan, quien era artífice, diseñador y bordador en material azul, en púrpura, en carmesí y en lino.

24 Todo el oro empleado en la obra, en toda la obra del santuario, era oro de la ofrenda, y fueron novecientos cincuenta y ocho kilos según la moneda del santuario[a]25 La plata de los inscritos de la asamblea fue de tres mil trescientos veinte kilos, según la moneda del santuario[b]26 Esto representaba seis gramos por persona, según la moneda del santuario[c], de todos los contados de veinte años para arriba, los cuales fueron seiscientos tres mil quinientos cincuenta. 27 Los tres mil trescientos kilos de plata fueron fundidos para hacer las bases del santuario y las bases del velo, cien bases por tres mil trescientos kilos, treinta y tres kilos por base. 28 De veinte kilos hizo los ganchos de los pilares, revistió sus capiteles y les puso sus bandas.

29 El bronce de la ofrenda fue dos mil trescientos veintiséis kilos. 30 Con él hizo las bases de la entrada del tabernáculo de reunión, el altar de bronce y su rejilla de bronce; todos los utensilios del altar, 31 las bases del atrio alrededor, las bases de la entrada del atrio, todas las estacas del tabernáculo y todas las estacas del atrio alrededor.

39 Hicieron las vestiduras tejidas de material azul, de púrpura y de carmesí, para servir en el santuario. Hicieron las vestiduras sagradas para Aarón, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

Exodo 39:2-21 (RVA)


Hicieron el efod de oro, de material azul, de púrpura, de carmesí y de lino torcido. Extendieron láminas de oro e hicieron hilos para tejerlos junto con el material azul, la púrpura, el carmesí y el lino, obra de fina artesanía. Le hicieron hombreras que se juntaban sobre él en sus dos extremos, para poderse unir. Su ceñidor para ajustar el efod, el cual está sobre este, era de la misma hechura y de los mismos materiales: oro, azul, púrpura, carmesí y lino torcido, como el SEÑOR había mandado a Moisés. Labraron las piedras de ónice con engastes de oro alrededor. Fueron grabadas con grabadura de sello, con los nombres de los hijos de Israel. Y las pusieron sobre las hombreras del efod, como piedras para recordar a los hijos de Israel, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

Hicieron también el pectoral, obra de fina artesanía como la hechura del efod: de oro, de material azul, de púrpura, de carmesí y de lino torcido. Era cuadrado y plegado; hicieron el pectoral de veintidós centímetros de largo y de veintidós centímetros de ancho, plegado. 10 Engastaron en él cuatro hileras de piedras: La primera hilera tenía un rubí, un topacio y un berilo. 11 La segunda hilera tenía una turquesa, un zafiro y un diamante. 12 La tercera hilera tenía un jacinto, un ágata y una amatista. 13 La cuarta hilera tenía un crisólito, un ónice y un jaspe. Estas piedras estaban montadas en engastes de oro. 14 Estas piedras correspondían a los nombres de los hijos de Israel; eran doce como sus nombres. Correspondían a las doce tribus, como grabaduras de sello, cada una con su nombre.

15 Hicieron también sobre el pectoral las cadenillas trenzadas como cordón, de oro puro. 16 Asimismo, hicieron los dos engastes de oro y los dos anillos de oro, y pusieron los anillos en los dos extremos del pectoral. 17 Metieron los dos cordones de oro en los dos anillos en los extremos del pectoral, 18 y fijaron los dos extremos de los dos cordones en los dos engastes y los fijaron sobre las hombreras del efod, en su parte delantera.

19 Hicieron otros dos anillos de oro que pusieron en los dos extremos del pectoral, en el borde que está al lado interior del efod. 20 Hicieron otros dos anillos de oro y los fijaron en la parte inferior de las dos hombreras del efod, en su parte delantera, frente a su unión sobre el ceñidor del efod. 21 Después ataron el pectoral por sus anillos a los anillos del efod con un cordón azul, para que estuviera sobre el ceñidor del efod y para que el pectoral no se desprendiera del efod, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

Exodo 39:22-32 (RVA)


22 Hizo también la túnica del efod, obra de tejedor, toda de material azul. 23 La túnica tenía una abertura en medio de ella como abertura de coraza de cuero, con un borde alrededor de la abertura, para que no se rompiera. 24 En los bordes inferiores de la túnica hicieron las granadas de material azul, de púrpura, de carmesí y de lino torcido. 25 También hicieron las campanillas de oro puro, y las pusieron entre las granadas alrededor de los bordes de la túnica: 26 campanilla y granada, luego campanilla y granada, alrededor de los bordes de la túnica, para servir, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

27 También hicieron para Aarón y sus hijos el vestido de lino, obra de tejedor. 28 Hicieron de lino el turbante y los adornos de los otros turbantes. Y los pantalones fueron hechos de lino torcido. 29 También el cinturón era de lino torcido, de material azul, de púrpura y de carmesí, obra de bordador, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

30 Asimismo, hicieron de oro puro una lámina en forma de flor para la diadema sagrada, y con grabadura de sello inscribieron en ella: “Consagrado al SEÑOR”. 31 Sobre ella pusieron un cordón azul, para colocarla en alto sobre el turbante, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

32 Así fue acabada toda la obra de la morada, el tabernáculo de reunión. Los hijos de Israel hicieron conforme a todo lo que el SEÑOR había mandado a Moisés; así lo hicieron.

Exodo 39:33-43 (RVA)


33 Llevaron a Moisés el tabernáculo, la tienda y todos sus accesorios: sus ganchos, sus tablones, sus travesaños, sus pilares, sus bases, 34 la cubierta de pieles de carneros teñidas de rojo, la cubierta de pieles finas, el velo de separación; 35 el arca del testimonio, sus varas y el propiciatorio; 36 la mesa con todos sus utensilios y el pan de la Presencia; 37 el candelabro de oro puro, su hilera de lámparas y todos sus utensilios; el aceite para la iluminación; 38 el altar de oro, el aceite de la unción, el incienso aromático, la cortina de la entrada del tabernáculo; 39 el altar de bronce con su rejilla de bronce, sus varas y todos sus utensilios; la fuente y su base, 40 las mamparas del atrio, sus pilares, sus bases, la cortina de la entrada del atrio, sus cuerdas, sus estacas y todos los utensilios para el servicio en la morada, el tabernáculo de reunión; 41 las vestiduras de material tejido, para servir en el santuario, las vestiduras sagradas para el sacerdote Aarón y las vestiduras de sus hijos, para servir como sacerdotes. 42 Los hijos de Israel hicieron todo el trabajo conforme a todo lo que el SEÑOR había mandado a Moisés.

43 Moisés vio toda la obra, y he aquí que la habían hecho como el SEÑOR había mandado; así la habían hecho. Y Moisés los bendijo.

Exodo 40:1-16 (RVA)


40 El SEÑOR habló a Moisés diciendo: “El primer día del mes primero[a] harás levantar la morada, el tabernáculo de reunión. Pondrás allí el arca del testimonio y la cubrirás con el velo. Meterás la mesa y la pondrás en orden. Meterás también el candelabro y encenderás sus lámparas. Pondrás el altar de oro para el incienso delante del arca del testimonio, y pondrás la cortina a la entrada del tabernáculo.

“Después pondrás el altar del holocausto delante de la entrada de la morada, el tabernáculo de reunión. Colocarás la fuente entre el tabernáculo de reunión y el altar, y pondrás agua en ella. Finalmente pondrás el atrio alrededor y la cortina a la entrada del atrio.

“Luego tomarás el aceite de la unción, y ungirás el tabernáculo y todo lo que está en él. Así lo consagrarás junto con todos sus utensilios, y será santo. 10 Ungirás también el altar del holocausto y todos sus utensilios. Así consagrarás el altar, y el altar será santísimo. 11 Asimismo, ungirás la fuente y su base, y la consagrarás.

12 “Después harás que Aarón y sus hijos se acerquen a la entrada del tabernáculo de reunión, y los lavarás con agua. 13 Vestirás a Aarón con las vestiduras sagradas, lo ungirás y lo consagrarás, para que me sirva como sacerdote. 14 Luego harás que sus hijos se acerquen, los vestirás con las vestiduras 15 y los ungirás como ungiste a su padre. Así me servirán como sacerdotes. Su unción les servirá para un sacerdocio perpetuo a través de sus generaciones”.

16 Moisés hizo conforme a todo lo que el SEÑOR le había mandado; así lo hizo.

Exodo 40:17-27 (RVA)


17 Y el tabernáculo fue levantado el primer día del mes primero del segundo año. 18 Moisés hizo levantar el tabernáculo y asentó sus bases, puso sus tablones, colocó sus travesaños, levantó sus pilares, 19 extendió la tienda sobre el tabernáculo y colocó la cubierta encima del tabernáculo, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

20 Después tomó el testimonio y lo puso dentro del arca. Colocó las varas en el arca, y encima de ella puso el propiciatorio. 21 Introdujo el arca en el tabernáculo, puso el velo de protección y cubrió el arca del testimonio, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

22 Después puso la mesa en el tabernáculo de reunión, en el lado norte del tabernáculo, fuera del velo. 23 Colocó sobre ella en orden el pan delante del SEÑOR, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

24 Colocó el candelabro en el tabernáculo de reunión, frente a la mesa, en el lado sur del tabernáculo. 25 Luego encendió las lámparas delante del SEÑOR, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

26 Luego colocó el altar de oro en el tabernáculo de reunión, delante del velo. 27 Y quemó sobre él incienso aromático, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

Exodo 40:28-38 (RVA)


28 Puso, asimismo, la cortina a la entrada del tabernáculo. 29 Colocó el altar del holocausto a la entrada de la morada, el tabernáculo de reunión, y sobre él ofreció el holocausto y la ofrenda vegetal, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

30 Colocó la fuente entre el tabernáculo de reunión y el altar, y puso en ella agua para lavarse. 31 Moisés, Aarón y sus hijos lavaban en ella sus manos y sus pies. 32 Cuando entraban en el tabernáculo de reunión y cuando se acercaban al altar, se lavaban, como el SEÑOR había mandado a Moisés.

33 Finalmente, hizo levantar el atrio alrededor del tabernáculo y del altar, y puso la cortina a la entrada del atrio. Y así Moisés acabó la obra.

34 Entonces la nube cubrió el tabernáculo de reunión, y la gloria del SEÑOR llenó la morada. 35 Moisés no podía entrar en el tabernáculo de reunión, porque la nube estaba sobre él, y la gloria del SEÑOR había llenado la morada.

36 En todas sus etapas, cuando la nube se levantaba del tabernáculo, los hijos de Israel partían; 37 pero si la nube no se levantaba, no partían hasta el día en que ella se levantaba. 38 Porque en todas sus etapas, la nube del SEÑOR estaba de día sobre el tabernáculo; y el fuego estaba allí de noche, a la vista de toda la casa de Israel.

1 Reyes 7: 51-8: 21 (RVA)


51 Así se terminó toda la obra que el rey Salomón hizo para la casa del SEÑOR. Entonces Salomón introdujo las cosas que su padre David había consagrado, y puso la plata, el oro y los utensilios en los tesoros de la casa del SEÑOR.

8 Entonces Salomón congregó en Jerusalén a los ancianos de Israel, a todos los jefes de las tribus y a los jefes de las casas paternas de los hijos de Israel ante el rey Salomón, para hacer subir el arca del pacto del SEÑOR desde la Ciudad de David, que es Sion. Y se congregaron ante el rey Salomón todos los hombres de Israel en la fiesta en el mes de Etanim, que es el mes séptimoc.

Fueron todos los ancianos de Israel, y los sacerdotes tomaron el arca. Luego subieron el arca del SEÑOR, el tabernáculo de reunión, y todos los utensilios sagrados que estaban en el tabernáculo; los sacerdotes y los levitas los subieron. El rey Salomón y con él toda la congregación de Israel, que se había reunido junto a él, estaban delante del arca, sacrificando tantas ovejas y vacas que por su gran cantidad no se podían contar ni numerar.

Entonces los sacerdotes introdujeron el arca del pacto del SEÑOR en su lugar, en el santuario interior del templo, en el lugar santísimo, debajo de las alas de los querubines. Porque los querubines extendían las alas sobre el lugar del arca, de modo que los querubines cubrían el arca y sus varas por encima. Las varas eran tan largas que los extremos de las varas se podían ver desde el lugar santo, que estaba delante del santuario interior; pero no se podían ver desde afuera. Y allí han quedado hasta el día de hoy. Ninguna cosa había en el arca, excepto las dos tablas de piedra que Moisés había colocado allí en Horeb, donde el SEÑOR hizo pacto con los hijos de Israel, cuando salieron de la tierra de Egipto.

10 Y sucedió que cuando los sacerdotes salieron del santuario, la nube llenó la casa del SEÑOR. 11 Y los sacerdotes no pudieron continuar sirviendo por causa de la nube, porque la gloria del SEÑOR había llenado la casa del SEÑOR.

12 Entonces Salomón dijo: “El SEÑOR ha dicho que él habita en la densa oscuridad. 13 Ciertamente te he edificado una casa sublime, una morada donde habites para siempre”.

14 El rey se volvió y bendijo a toda la congregación de Israel. Y toda la congregación de Israel estaba de pie. 15 Entonces dijo: “Bendito sea el SEÑOR Dios de Israel, quien con su mano ha cumplido lo que con su boca prometió a mi padre David, diciendo: 16 ‘Desde el día en que saqué a mi pueblo Israel de Egipto, no había elegido ninguna ciudad de todas las tribus de Israel para edificar una casa donde estuviera mi nombre. Pero elegí a David para que estuviera al frente de mi pueblo Israel’.

17 “Estuvo en el corazón de mi padre David el anhelo de edificar una casa al nombre del SEÑOR Dios de Israel. 18 Pero el SEÑOR dijo a mi padre David: ‘Por cuanto ha estado en tu corazón el anhelo de edificar una casa a mi nombre, has hecho bien en tener esto en tu corazón. 19 Sin embargo, tú no edificarás la casa, sino tu hijo que te nacerá, él edificará la casa a mi nombre’.

20 “El SEÑOR ha cumplido su promesa que había hecho, y yo me he levantado en lugar de mi padre David. Me he sentado en el trono de Israel, como el SEÑOR había prometido, y he edificado la casa al nombre del SEÑOR Dios de Israel. 21 Y he dispuesto allí un lugar para el arca, en la cual está el pacto del SEÑOR que él hizo con nuestros padres cuando los sacó de la tierra de Egipto”.

Hebreos 8:1-13 (RVA)


8 En resumen, lo que venimos diciendo es esto: Tenemos tal sumo sacerdote que se sentó a la diestra del trono de la Majestad en los cielos, ministro del lugar santísimo y del verdadero tabernáculo que levantó el Señor y no el hombre.

Porque todo sumo sacerdote es puesto para ofrecer ofrendas y sacrificios; de ahí que era necesario que él también tuviera algo que ofrecer. Si estuviese sobre la tierra ni siquiera sería sacerdote, porque ya hay sacerdotes que presentan ofrendas según la ley. Ellos sirven a lo que es figura y sombra de las cosas celestiales, como se le había advertido a Moisés cuando estaba por construir el tabernáculo, diciendo: Mira, harás todas las cosas conforme al modelo que te ha sido mostrado en el monte. Pero ahora Jesús ha alcanzado un ministerio sacerdotal tanto más excelente por cuanto él es mediador de un pacto superior, que ha sido establecido sobre promesas superiores.

Porque si el primer pacto hubiera sido sin defecto no se habría procurado lugar para un segundo. Porque, reprendiéndoles, dice:

“He aquí vienen días”, dice el Señor, “en que concluiré con la casa de Israel

y con la casa de Judá un nuevo pacto;

no como el pacto que hice con sus padres en el día en que los tomé de la mano para sacarlos de la tierra de Egipto.

Porque ellos no permanecieron en mi pacto, y yo dejé de preocuparme por ellos”, dice el Señor.

10 “Porque este es el pacto que haré con la casa de Israel

después de aquellos días”, dice el Señor.

“Pondré mis leyes en la mente de ellos y en su corazón las inscribiré.

Y yo seré para ellos Dios,

y para mí ellos serán pueblo.

11 Nadie enseñará a su prójimo,

ni nadie a su hermano, diciendo: ‘Conoce al Señor’;

porque todos me conocerán,

desde el menor de ellos hasta el mayor.

12 Porque seré misericordioso en cuanto

a sus injusticias

y jamás me acordaré de sus pecados”.

13 Al decir “nuevo”, ha declarado caduco al primero; y lo que se ha hecho viejo y anticuado está a punto de desaparecer.

Estudios de la Porción

De la enseñanza del rabino

Estudios se están generando para un estudio profundo de las Escrituras.